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sábado, 12 de mayo de 2007

La poli y los mensajes de texto

Cuenta la Crónica web policial, que tres jóvenes que se encontraban en actitud sospechosa fueron detenidos en Villa Gobernador Gálvez, y la policía comprobó los ilícitos sospechados al revisar los mensajes de textos de sus celulares.

Tras la detención y la incautación de un revolver calibre 38, revisaron los mesajes de texto del celular de uno de ellos y comprobaron que había un SMS que decía "estoy en la plaza, tengo un 38, lo cambio por una play".

El comisario de la comarca entonces, sagazmente, decidió un "Operativo SMS", que consistió en la detención, interrogatorio y revisión de los mensajes de texto de los celulares de personas sospechosas para los agentes (es decir, cabecitas negras, bolivianos, peruanos, travestis, prostitutas y homosexuales).
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Luego de analizar los mensajes en los celulares, previo a realizar alguna llamada a alguna amiguita para verificar que el mismo estuviese funcionando adecuadamente, se presentó un informe con los mensajes sospechosos:

1. Estoy en el banco con una 45
2. Me quedé sin papel y sin merca
3. Mandame línea coca
4. Al botón del policía lo perdí!
5. Se la mostré y me comí al pebete
6. Ya hicimos el secuestro
7. Se armó la gorda

En un esfuerzo policial descomunal, sin precedentes, en donde se llamó a laa Brigada (por el frío que hace en estos días) analizaron cada mensaje, llegando a la siguiente conclusión:

1. El pibe estaba en el banco de la plaza con una veterana de 45 pirulos, muy bonita.
2. El librero se había quedado sin papel A4, Legal y Carta, y casi sin el resto de la mercadería que vendía en su negocio.
3. El del kiosco pedía gaseosas de la línea Coca Cola, ya que Pepsi tenía.
4. La modista perdió el botón que le dío el Cabo Caña Veral pa que le cosa.
5. El alumno le había mostrado a su profesora un trabajo práctico, tras lo cual almorzó un pebete de salame y queso que su mamá le había dado por la mañana.
6. El Oficial de Justicia ya había hecho el secuestro judicial de los bienes de un deudor, tal como lo había ordenado el juez de la causa.

El Comisario, fastidiado, decidió dar de baja el operativo, tras los resultados negativos.

Una lástima, la gorda se armó con una escopeta, luego de ver la película "Amor sin Barredas", y comenzó a los escopetazos limpios (le había pasado Blem al fusil...) desparramando vísceras y órganos por doquier, ante es estupor de los vecinos que no salían de si mismos, tan solo pa no morirse.